El 14 de enero de cada año, los tunecinos conmemoran el aniversario de la revolución que derrocó al dictador Zine el-Abodine Ben Ali, quien gobernó Túnez a lo largo de más de dos décadas.
La chispa de las multitudinarias manifestaciones públicas se encendió el 17 de diciembre de 2010, cuando el joven vendedor ambulante Mohamed Bouazizi se inmoló tras unos choques con varios agentes de policía ante el Ayuntamiento de Sidi Bouzid. Su muerte desencadenó masivas movilizaciones en todo Túnez, que resultaron en el derrocamiento de Ben Ali. El dictador tunecino huyó del país el 14 de enero de 2011, refugiándose en Arabia Saudí.
Las multitudinarias protestas en el país árabe marcaron el inicio de los movimientos revolucionarios conocidos como la Primavera Árabe.